Resumen de Tus Zonas Erróneas
Tus Zonas Erróneas es un libro de autoayuda y desarrollo personal del Dr. Wayne W. Dyer. Publicado por primera vez en 1976, el libro promete ayudar a los lectores a liberarse del pensamiento negativo y de los malos patrones de conducta autodestructivos. Es el libro debut de Dyer y vendió más de 35 millones de copias. Recibió muchos elogios tras su publicación por ser práctico y fácil de seguir. Dyer es ahora el autor de numerosos libros de autoayuda que se centran en hacernos la vida más fácil. Un consejero calificado, Dyer es ampliamente reconocido por llevar los principios humanísticos de autoayuda al público general.
Dyer argumenta que todos tenemos barreras internas que nos impiden lograr la vida rica y plena que estamos buscando. Estas son las que Dyer llama nuestras zonas erróneas. El mensaje clave del libro es que, aunque no podemos cambiar todo sobre nosotros mismos, podemos tomar el control de nuestros sentimientos y decidir no solo cómo reaccionamos ante las situaciones, sino también quiénes queremos ser.
El problema para todos nosotros es que constantemente buscamos la aprobación del mundo exterior. Ya sea nuestro grupo de compañeros, nuestros compañeros de trabajo o nuestras familias, confiamos en las opiniones de los demás para guiar las decisiones que tomamos. Esto generalmente conduce a la infelicidad y sentimientos de indignidad, como si solo tuviéramos valor mientras otras personas nos aprueben a nosotros y a nuestros ideales. Es este patrón de pensamiento poco saludable lo que Dyer desafía en su libro.
Los patrones de pensamiento negativos e improductivos nos hacen sentir emociones tóxicas. Estas emociones, como el miedo y la ansiedad, nos impiden perseguir las cosas que deseamos perseguir. Por ejemplo, podemos evitar a las personas nuevas porque tememos el rechazo, o podemos no expresar nuestros verdaderos sentimientos porque tenemos miedo de que los demás nos juzguen. Aprendemos estos patrones temprano en la vida y es muy difícil deshacerse de ellos. Sin embargo, podemos cambiar la forma en que abordamos cualquier situación dada: todo es cuestión de controlarnos y ser dueños de nosotros mismos.
Ser dueños de nosotros mismos significa ser dueños de las vidas que estamos tratando de lograr. Si todos buscamos esencialmente la felicidad, entonces debemos entender qué es la felicidad. La felicidad puede ser cualquier cosa, desde un solo gran día hasta un estado de ser. Para estar en paz con nosotros mismos y encontrar la felicidad espiritual, necesitamos amarnos a nosotros mismos. El amor propio, sin embargo, es donde muchas personas encuentran dificultades.
Amarnos a nosotros mismos es difícil porque significa aceptarnos a nosotros mismos sin la necesidad de la aprobación que buscamos durante gran parte de nuestra vida. Sin embargo, anhelar validaciones y opiniones siempre nos detendrá. Al liberarnos de estos confines, somos más capaces de amarnos a nosotros mismos ya otras personas porque podemos aceptar a las personas tal como son.
En esta sociedad, argumenta Dyer, a menudo vinculamos nuestra autoestima a nuestros logros. Si no estamos donde esperábamos estar, ya sea en el amor, la vida o nuestra carrera, entonces nos sentimos menos valiosos que las personas que han logrado lo que queremos. Luego nos encerramos en nosotros mismos y dejamos de intentarlo, porque esto es más fácil que exponernos y fracasar. Dyer advierte que si queremos algo, debemos ir a por ello.
El punto clave de Dyer es que al basar nuestro valor en la aprobación de los demás, nunca tenemos el control de nosotros mismos. Nuestro bienestar está controlado por otra persona, y esa no es manera de vivir nuestras vidas. Siempre seremos infelices y temerosos de correr riesgos porque nuestro propio sentido de identidad es muy precario. Para ayudarnos a encontrar mejores formas de vivir nuestras vidas, Dyer ofrece estrategias.
Lo primero que debemos hacer es dejar de etiquetarnos. Miramos a nuestro pasado y dejamos que las etiquetas, las fortalezas y las debilidades den forma a nuestra identidad. En segundo lugar, nos preocupan los errores del pasado y las malas decisiones. En lugar de resentir las elecciones que hemos hecho o sentirnos culpables por haber fallado de alguna manera, simplemente debemos buscar oportunidades para crecer y desarrollarnos.
Para superar verdaderamente nuestras zonas erróneas, no podemos tener miedo de fallar. El fracaso nos impide probar algo nuevo o vivir la vida que queremos, porque nos preocupa que la gente nos juzgue. Nos preocupa que otros se burlen de nosotros o nos digan que dejemos de intentarlo. Todos debemos fallar para poder crecer y mejorar, y nos estamos frenando al negarnos a probar algo nuevo.
Dyer ofrece algunos consejos para superar nuestra sensación de fracaso. Primero, debemos redefinir el fracaso. No fallamos porque somos malos en algo. Solo fallamos cuando nos negamos a aprender de nuestros errores, o cuando nos damos por vencidos porque alguien espera que lo hagamos. Debemos perseguir las cosas no porque seamos buenos en ellas, sino porque nos traen alegría, sin importar lo que digan los demás.
Otra cosa que debemos hacer es dejar de procrastinar y actuar. Procrastinar solo nos da excusas para no lograr algo y no nos hará más felices. En cualquier momento, podemos decir que no necesitamos aprobación o validación y, en cambio, seguir adelante con nuestras vidas. El hecho de que podamos hacer este cambio en nuestras vidas hoy, ahora mismo, es un mensaje poderoso en el libro de Dyer.
Crítica del libro “ Tus Zonas Erróneas ” :
Como orador y psicólogo, Wayne Dyers ha trabajado con miles de personas. Ha tenido la oportunidad de observar la naturaleza humana desde todos los ángulos. Se muestra en este libro.
Todos tenemos zonas erróneas; nos hacen humanos. Para las personas que quieren mejorar, se trata de vaciarlas y transformarlas. Este libro es una caja de herramientas muy útil para explorar lo desconocido, liberarse del pasado, dejar de tener miedo, salirse de la caja y ser uno mismo y feliz. Dyer no revoluciona el desarrollo personal ni la psicología, esa no es su intención. Sus conceptos son familiares, incluso obvios, pero proporciona cursos de actualización esenciales. Algunas partes pueden dar la impresión de que está afirmando lo obvio, pero a menudo son estas mismas las que nos confrontan con nuestros comportamientos sin sentido y hábitos negativos.
En mi opinión, es un libro que debe leerse varias veces y que requiere un período de asimilación. El tipo de libro que puede volver a leer meses, incluso años después, y seguir obteniendo nueva información.
Además, se lo recomiendo a cualquiera que esté trabajando en sí mismo. Cuando nos sentimos perdidos o experimentamos falta de discernimiento, este libro nos vuelve a encarrilar.